Estrés y relaciones sexuales no son un buen binomio. Vivimos en una sociedad en la que, en muchos casos, sufrimos la relación entre estrés y relaciones sexuales que causa falta de deseo o de relaciones satisfactorias en algunos casos.
En muchos casos, se trabaja durante muchas horas o se llega cansado/a a casa, pero también hay otras causas que provocan que haya una relación directa entre estrés y relaciones sexuales, como son las consecuencias de algunas dinámicas en las hormonas o la tensión de los órganos sexuales. Hoy en Primor te damos las causas más comunes de este problema y los consejos que te puedan ayudar a mejorar la situación.
Estrés y relaciones sexuales: Causas
Vamos a ver cuáles son las causas que provocan una relación directa entre estrés y relaciones sexuales, para tener conciencia del problema. Lo mejor en estos casos es saber cuál es la raíz del problema en cada caso. Solo así se puede saber cuáles serán las soluciones a implementar.
- Cansancio: el cansancio es uno de los enemigos en el binomio estrés y relaciones sexuales. Evidentemente, cuando hay mucho cansancio el cuerpo no siente el deseo, sino la necesidad primaria de descansar. Sobre todo durante la semana, los ritmos entre trabajo y conciliación familiar en muchos casos, hace que algunas parejas llegan a la noche exhaustas. No solamente parejas con hijos/as, ya que esto le sucede a algunas parejas jóvenes también.
- Niveles de cortisol: los niveles de cortisol son directamente afectados por el estrés. Esto afecta hasta tal punto que puede además disminuir los niveles de testosterona, que es la hormona relacionada con el deseo sexual en hombres y mujeres.
- Tensión muscular: la tensión muscular que provoca el estrés se manifiesta en muchos casos en todo el cuerpo, además de en los órganos sexuales, lo que hace que en muchos casos sea difícil excitarse debido a esa tensión.
- Dificultad para el orgasmo: ya que el estrés y las consecuencias que hemos visto que tiene este tanto a nivel físico como mental, hacen difícil relajarse, lo que es clave para alcanzar el clímax.
Estrés y relaciones sexuales: Consejos
Para paliar los problemas que derivan del tan común binomio estrés y relaciones sexuales, vamos a ver algunos consejos que suelen funcionar bien.
- Buscar un espacio: en muchos casos, las causas del estrés en las relaciones sexuales son aún más difíciles de paliar porque hay poco tiempo para las relaciones sexuales. Lo mejor en estos casos es tomarse el tiempo para tener relaciones sexuales satisfactorias y hacer que el cuerpo se prepare para estas. Esto puede ser reservarse la tarde del sábado o el domingo o alguna noche de la semana en la que se tenga más tiempo.
- Prácticas de relajación: las prácticas de relajación ayudan a aliviar el estrés a nivel mental, que suele sabotear las relaciones sexuales y el clímaz sobre todo cuando hay muchas preocupaciones. Pero además, alivian la tensión física que produce el estrés. Algunas ideas pueden ser la meditación, el yoga o las prácticas de tantra. Estas últimas son prácticas eróticas que tienen el objetivo de que la pareja medite junta, se estimule y se cuide desde un lugar de conexión y calma antes de tener relaciones sexuales. Existen escuelas para aprenderlas tanto online como presenciales.
- Masajes: los masajes son una buena manera de comenzar una relación sexual. Sobre todo cuando se llega cansado/a al final del día. Intercambiar un masaje, además de acabar con el estrés, va preparando el cuerpo suavemente y estableciendo una relación amorosa e íntima entre la pareja.
- Comunicación y acuerdos: por último y no por ello menos importante, la comunicación es esencial en estos casos. Se puede hablar con la pareja de las sensaciones que se están teniendo en este ámbito tan importante para buscar soluciones que encajen.