Nunca podemos saber qué es lo que hay detrás de una firma que se erige como marca sostenible. Lo cierto es que hoy en día términos como este pueden ser algo confusos y es importante saber cómo diferenciar de una marca que es sostenible, de una que no lo es.
Lo que se supone que es una marca sostenible
En algunos casos, sostenible significa simplemente que una marca produce bajo unos términos que respetan la sustentabilidad del planeta. En otros, puede que se le llame marca sostenible a una que recicla los materiales de sus envases. En otras ocasiones, una marca sostenible puede ser a la vez ecológica o bio.
No obstante, términos como bio, ecológico, vegano o libre de parabenes no tienen por qué ir siempre de la mano de una marca sostenible. Lo que es cierto es que, cuantos más factores tengas controlados de lo que dice ser una marca sostenible, más soberanía tendrás a la hora de consumirla y de saber si la eliges frente a otras del mercado.
Factores que definen una marca sostenible
Ya lo hemos dicho. Algunos de los factores que vamos a ver están presentes en una marca sostenible, pero no tienen porqué estar todos ni tampoco convivir. Vamos a ver cuáles son las claves que debes controlar para verificar que una marca lo es y que no se trata de una estrategia de marketing que juega con el lenguaje:
Los certificados
Una de las banderas que puede agitar una marca sostenible y que es imposible de burlar, es la de los certificados oficiales. Ya sean certificados de cosmética ecológica, de materiales reciclados o cruelty free. Si aparecen en sus envases, puedes tener confianza y lo mejor es que vayas en su busca para certificar que es una marca sostenible.
La comunicación
La comunicación puede llegar a ser muy subjetiva. Esto quiere decir que hay marcas sostenibles que hacen un lavado de cara con algunas palabras como natural o verde. Ante la moda de la marca sostenible, algunas empresas que no tienen nada que ver con esta ética y política, aprovechan para cuidar las palabras en la comunicación que puedan ser confusas e incluso a jugar con diseños visuales, colores etc que se asemejan a las que lo son.
El compromiso social
El compromiso social suele ser una de las bases de algunas de las marcas sostenibles. Por ejemplo, algunas de ellas están involucradas en iniciativas sociales y ambientales. Esto quiere decir que incluso donan una cuantía de sus beneficios a estas causas o que dan trabajo a quienes viven en comunidades que lo necesitan y en las que hay materias primas que se usan en los procesos.
Los ingredientes que usa
Los ingredientes que usa una marca sostenible también son cruciales y hacen que se sepa cuál es el origen real de sus productos. Los ingredientes que no son propios de una marca sostenible son aquellos que afectan a la salud como las siliconas no biodegradables, los parabenos y sulfatos o los microplásticos. Los ingredientes bio y los veganos suelen ser seguros de una marca sostenible.
Los envases
Cabe matizar que en el caso de los plásticos, es complejo envasar ciertos productos en otros materiales por ser líquidos o cremas. No obstante, cada vez existen más materiales similares que son sostenibles. De no ser así siempre está la posibilidad de envasar con plástico reciclado si se es realmente una marca sostenible.
La forma de producción
Los métodos de producción de una marca sostenible son algunos como la reducción del consumo de agua y energía, el uso de energías renovables, de productos contaminantes o la producción local para reducir la huella de carbono.