En un mundo donde el estrés y las preocupaciones parecen estar a la orden del día, encontrar actividades que nos ayuden a relajarnos y mantener nuestra salud mental equilibrada es más importante que nunca. Y aunque algunos puedan sorprenderse, los expertos aseguran que una actividad aparentemente sencilla como coser tiene múltiples beneficios para nuestra mente y bienestar emocional. ¿Te animas a descubrir por qué?
Coser tiene múltiples beneficios para nuestra salud mental
Coser es mucho más que un simple hobby; es una actividad que puede tener efectos profundos y positivos en nuestra salud mental. Según varios estudios, las manualidades, y en particular la costura, ayudan a reducir el estrés y la ansiedad. Esto se debe, en gran medida, a que cuando nos concentramos en una tarea manual, el cerebro se enfoca tanto en la actividad que nos aleja de los pensamientos negativos y preocupaciones diarias. De hecho, varios terapeutas utilizan técnicas como la “costura mindfulness” para ayudar a las personas a liberar tensiones y mejorar su bienestar emocional.
La conexión entre la mente y las manos
Uno de los principales beneficios de coser es que, al ser una actividad manual, activa lo que se conoce como la “mente en modo de flujo”. Este estado es aquel en el que te sientes completamente inmerso en la actividad, sin pensar en nada más. Es similar a la meditación, ya que el cuerpo y la mente se alinean en un mismo objetivo: crear. El proceso de coser requiere concentración, pero también nos permite desconectar de los problemas cotidianos. Este tipo de concentración profunda es fundamental para reducir los niveles de cortisol (la hormona del estrés) en el cuerpo, lo que nos ayuda a sentirnos más relajados y tranquilos.
Coser como forma de autoterapia
La costura no solo te ayuda a relajarte, sino que también puede tener un impacto positivo en tu autoestima y confianza. Terminar un proyecto de costura, ya sea una prenda de ropa, una manta o incluso una simple funda de cojín, nos da una sensación de logro y satisfacción. La sensación de haber creado algo con nuestras propias manos nos proporciona un fuerte impulso de autoestima, lo cual es crucial para nuestra salud mental. Además, a medida que nos enfrentamos a nuevos desafíos de costura, aprendemos a ser más pacientes con nosotros mismos y a disfrutar del proceso de aprendizaje.
Un refugio de creatividad y expresión
Coser también es una forma de expresión personal. Desde la elección de los colores y tejidos hasta la creación de patrones y diseños, cada proyecto es una oportunidad para ser creativo y mostrar nuestra personalidad. Esta libertad creativa es esencial para nuestra salud mental, ya que nos permite ser auténticos y alejarnos de las presiones externas. No hay reglas estrictas en la costura, solo un espacio para crear sin juicio, lo que permite a nuestra mente relajarse y disfrutar del proceso sin miedo a cometer errores.
Socialización y comunidad
Aunque coser puede parecer una actividad solitaria, cada vez son más populares los grupos de costura y las comunidades online que se dedican a compartir proyectos y aprender juntas. Unirse a un grupo de costura puede ser una forma de socializar, compartir experiencias y sentirte parte de una comunidad. El apoyo y la camaradería que se encuentran en estos espacios pueden tener un impacto muy positivo en la salud mental, proporcionando un sentido de pertenencia y conexión emocional con otras personas que comparten intereses similares.