Cuidado de uñas

Una base bonita y fuerte de nuestras uñas hará que podamos presumir de una manicura o pedicura de diez. Las uñas son el espejo de nuestras manos, y si se te rompen o resquebrajan, acude a productos para el cuidado de uñas que las fortalezca, hidrate y endurezca. ¡En Primor tenemos los mejores!

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Tipos de cuidado que tus uñas necesitan

  • Aceite de cutículas. Nutritivos, fundentes y muy hidratantes, este tipo de productos fomenta un crecimiento más rápido, fuerte y sano de tus uñas.

  • Endurecedor de uñas. Perfecto para aquellas que sientan la uña débil, este esmalte endurece, fortalece y evita el astillamiento de las uñas. Además, previene el amarillamiento y prolonga la duración del esmalte.

  • Esmalte protector. Las base coat y top coat son esmaltes que proporcionan un acabado mucho más duradero. Preparan y sellan la uña para un esmaltado brillante, sano y sin perjudicar la uña.

  • Cremas de manos. Al igual que tus uñas necesitan aceite de cutículas, la piel de tus manos también necesitan un bote salvavidas en forma de crema hidratante para evitar la aparición de padrastros o pielecitas.

Cómo preparar tus uñas

  • Aceite de cutículas. Con el agua las uñas sufren, aplica de vez en cuando aceite de cutículas sobre la uña y la propia cutícula para mantenerlas hidratadas.

  • Esmalte protector. Si no te haces la manicura semipermanente puedes aplicar un top coat de gel para que dure dos semanas intacta. Es una forma para alargar la duración sin que las uñas sufran un tratamiento más agresivo.

  • Retira el protector solar. Es importante retirar bien los restos del protector solar que hayas aplicado para que el color se mantenga más tiempo. Intenta siempre lavar o limpiar las uñas una vez lo hayas aplicado.

  • Si aún estás a tiempo, deja que las uñas descansen al menos un par de semanas antes de comenzar a pintarlas. Durante esos días puedes aplicar productos que ayuden a regenerar la uña para que estén fuertes, hidratadas y con el largo deseado para una nueva manicura.

Qué hacer para mantener las uñas sanas

  • Secas y limpias. Así, (casi) siempre. Esto evitará que crezcan bacterias debajo de las uñas. El contacto continuo con el agua puede contribuir a que se partan las uñas. ¿Nuestra recomendación? Usa guantes para fregar o limpiar.

  • Higiene de las uñas. Corta tus uñas en línea recta y luego redondea las puntas en una curva suave. Ayúdate de un cortauñas.

  • Crema de manos. Una piel sana es una piel a prueba de balas. Recuerda esparcirla también por tus uñas y cutículas.

  • La capa protectora. Puede ser un endurecedor de uñas o una base coat, pero este producto te ayudará a presumir de uñas fuertes y sanas.

Que NO hacer para mantener las uñas sanas

  • No te muerdas las uñas ni las cutículas. Pueden dañar el lecho ungueal. Incluso un corte menor a lo largo de la uña puede permitir el ingreso de bacterias u hongos y provocar una infección.

  • No te quites los padrastros. Es posible que te arranques tejido vivo junto con el padrastro. ¿Cómo hacerlos desparecer? Cortándolos con cuidado y usando una crema hidratante para evitar su aparición.

  • Evita el uso de productos abrasivos. Como el quitaesmalte. Y si puedes escoger una fórmula sin acetona, mejor.

  • No ignores los problemas. Es lo más obvio y el error que más comentemos. Si ves algo raro en tus uñas, acude a un experto.

Cómo utilizar bien una lima de uñas

El modo de limarse y cortarse las uñas puede fortalecerlas o debilitarlas. Para conseguir unas uñas sanas y fuertes, se recomienda dejarlas crecer rectas hasta un milímetro y medio aproximadamente en los lados, y limarlas dándoles una forma semicuadrada u ovalada que siga el contorno de la punta del dedo. Te recomendamos limar desde la esquina de los laterales hacia el medio.

Lo ideal es que empieces a probar estas técnicas de limado poco a poco, primero haciendo un ligero cambio en la forma de tus uñas, hasta conseguir el diseño deseado para que tus manos luzcan más estilizadas, elegantes y femeninas.

Tipos de forma para tus uñas

  • Uñas cuadradas. Para lograrlas, simplemente lima recto, todas las veces en la misma dirección, por lo comentado al principio del post. Se mantienen muy bien a medida que van creciendo y quedan mejor si están esmaltadas.

  • Uñas cuadradas con las esquinas redondeadas. Esta es la forma elegida por quien las quiere llevar un poco largas pero no quiere estar demasiado pendiente de ellas. Es la forma más práctica para dejarlas crecer.

  • Uñas redondas. Es el limado estrella por ser la forma más práctica y con menos riesgo de rotura. Se hacen moviendo la lima hacia los lados, pero siempre en una sola dirección, para no abrir capas.

  • Uñas ovaladas. Esta forma se consigue cuando, una vez largas, se liman los bordes. Aunque pueda resultar un poco antigua, lo cierto es que favorece mucho a todas las manos.

  • Uñas almendradas. Son la estrella de esta temporada para quienes quieren llevar algo llamativo sin llegar a ser La Rosalía. La clave es dejarlas como ovaladas pero afinando un poco la punta.

  • Uñas ataúd. ¿A alguien le gusta esto? Pasapalabra. El caso es que existe… Y la forma, ya os la podéis imaginar.

  • Uñas en punta. Se conocen como stiletto y son las más trendy, solo aptas para mujeres muy atrevidas. El riesgo de rotura es alto pero, mientras tanto, ¡disfruta de tus garras!

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