Hidratantes faciales

Cremas hidratantes faciales de parafarmacia

Las cremas hidratantes faciales son un imprescindible en nuestra rutina diaria de cuidado facial. Sus fórmulas clínicamente probadas y recomendadas por dermatólogos son perfectas para tratar las afecciones cutáneas más comunes, como el acné o la dermatitis atópica. ¡Encuentra tus favoritas y dale a tu piel el cuidado más profesional!

11 productos

Factores Hidratantes Naturales + Ácido Hialurónico
7,50 €
7,50 €
25,00 € / 100 ML
Vitamina C 23% + Esferas de ácido hialurónico 2%
9,30 €
9,30 €
31,00 € / 100 ML
Ácido Ascórbico Etilado Solución al 15%
21,40 €
21,40 €
71,33 € / 100 ML
Escualeno al 100%
The Ordinary
12,00 €
12,00 €
40,00 € / 100 ML
Pycnogenol 5% Serum Antioxidante
13,20 €
13,20 €
88,00 € / 100 ML
Aceite de Argán Puro al 100%
9,00 €
9,00 €
30,00 € / 100 ML
Aceite virgen de Marula 100%
13,10 €
13,10 €
43,67 € / 100 ML
Solución de Ascorbil Tetraisopalmitato 20% en Vitamina F
23,60 €
23,60 €
78,67 € / 100 ML
No está disponible
Fosfato de Ascorbil Magnesio 10%
12,50 €
12,50 €
41,67 € / 100 ML
No está disponible
Ácido hialurónico (HA) 2% + vitamina B5
9,00 €
9,00 €
30,00 € / 100 ML
No está disponible
100% Organic Cold-Pressed Borage Seed Oil
5,00 €
5,00 €
16,67 € / 100 ML
No está disponible

Por qué comprar hidratantes faciales de parafarmacia

Los cosméticos y cremas hidratantes que se venden en parafarmacia cuentan con fórmulas clínicamente probadas y recomendadas por los expertos de la dermatología. Estos productos han estado sometidos a controles más estrictos, por lo que son hipoalergénicos y sus ingredientes son ideales para las pieles más sensibles y reactivas.

Con estos cosméticos estarás aportándole a tu piel el cuidado más profesional y supervisado. Una de sus grandes ventajas es su gran eficacia en las pieles más propensas a sufrir afecciones cutáneas, como el acné o la dermatitis que requieren un cuidado más especializado.

Consejos para escoger tu crema facial de parafarmacia

A la hora de comprar tu hidratante facial de parafarmacia, te queremos dar una serie de consejos para que tu elección sea la mejor y adaptada a las necesidades de tu piel.

  • Antes de adquirir un producto, descubre qué tipo de piel tienes. Es vital escoger una crema facial adecuada a las necesidades de tu dermis.

  • Ten en cuenta tu edad. Las necesidades de tu piel van cambiando a medida que vas creciendo, siendo a partir de los 25 años cuando en tu piel comienzan a aparecer las primeras líneas de expresión.

  • Asegúrate que el cosmético elegido cuenta con la etiqueta “testado dermatológicamente”. Solo así tendrás la confianza de que es un producto estudiado por dermatólogos, así como la eficacia y las reacciones que tendrá en tu piel.

¿Cómo saber qué tipo de piel tengo?

  • Piel normal. Si notas que tienes pocos granos, poros pequeños y tu piel no suele irritarse ni enrojecerse, lo más probable es que tengas una piel normal. Este tipo de piel suele ser equilibrada, no es demasiado seca ni muy grasa, y no tiene manchas.

  • Piel mixta. Este tipo de piel es una combinación entre la piel seca y la piel grasa cuyas particularidades se manifiestan principalmente en el rostro. Se caracteriza por tener la conocida zona “T” (frente, nariz y barbilla) con tendencia grasa.

  • Piel grasa. La piel grasa es una piel que produce un exceso de lípidos. Este desarreglo puede tener su origen en las variaciones hormonales, o agresiones externas como el estrés o la contaminación. A diferencia de la piel seca, en este caso las glándulas sebáceas aportan bastantes más lípidos de los necesarios, y cuando el exceso de grasa se mezcla con la suciedad y las células muertas de la piel, comienzan a formarse granos.

  • Piel seca. La piel seca es pobre en lípidos y con tendencia a la deshidratación. Es por eso que necesita cuidados específicos que la ayuden a mantener su función de barrera y a preservar su hidratación. Las pieles secas se caracterizan por tener una sensación de tirantez, tono apagado, tacto áspero, irritable, con rojeces e incluso puede presentar descamación.

  • Piel sensible. Una piel sensible e intolerante reacciona más que una piel normal, es decir, es hiperreactiva. Experimenta sensaciones de cosquilleo, calor (quemazón), hormigueo y picor (aunque esto es poco frecuente).

Preguntas frecuentes

¿Cuál es la diferencia entre cosmética y dermocosmética?

Los cosméticos de farmacia se llaman dermocosméticos. Son productos y tratamientos ideados por dermatólogos que atienden a las necesidades de la piel teniendo en cuenta su tipo y carencias. Su concentración es más alta y resultan más eficaces frente a cosméticos  tradicionales. 

 

Además, un dermocosmético mejora la textura, estructura y apariencia de la piel poco a poco y de forma muy localizada; mientras que los cosméticos se notan solo cuando el uso es continuado. Por eso mismo, aunque ambos mejoran su aspecto, podríamos decir que los cosméticos lo hacen por fuera y los dermocosméticos lo hacen por fuera y por dentro.

¿Cuáles son las mejores cremas faciales hidratantes de parafarmacia?

¿Cómo consigue el ácido hialurónico rejuvenecer el rostro?

El ácido hialurónico es el ingrediente estrella de la cosmética y la medicina estética, ya que tiene la capacidad de rellenar arrugas y rejuvenecer el aspecto. Es súper tolerable y sus principales beneficios son:

  • Mantiene la estructura de la piel, ya que le aporta la hidratación que esta necesita, haciendo que nuestro rostro se vea más firme y terso.
  • Rellena arrugas y líneas de expresión desde el interior.
  • Aporta un extra de hidratación a la piel frente a factores externos que puedan deshidratarla o debilitarla.
  • Facilita la reparación celular.