Ventajas y desventajas de un bronceador
Aceleran tu bronceado.
Los resultados son más duraderos.
Hidratan la piel que se pierde con la exposición solar.
Notarás tu piel más suave.
Muchos tienen propiedades antibacterianas que eliminan el mal olor del sudor.
Pueden provocar brotes de acné o reacciones en personas de piel sensible.
Debes combinarlo con un buen protector solar, ya que de lo contrario, puedes dañar la dermis, acelerando el envejecimiento y pudiendo provocar melanomas e incluso cáncer.
Autobronceador vs acelerador de bronceado (bronceadores)
Autobronceadores. Son productos cosméticos que “tiñen” la capa superior de la dermis gracias a sus fórmulas que reaccionan con la queratina. Por tanto, con ellos, nos bronceamos sin necesidad de tomar el sol.
Aceleradores de bronceado (bronceadores). Por el contrario, estos cosméticos sí necesitan de la exposición solar. Se aplican días previos a dicha exposición, aumentando la síntesis de melanina para un resultado más homogéneo y rápido.
¿Cómo aplicar bien un bronceador para no quemarme?
Antes de salir de casa, aplica una capa homogénea de tu bronceador por aquellas zonas que quieras que se oscurezcan más rápido.
Espera a que se absorba, y después aplica tu protector solar. Puede que hayas leído que es un paso que puedes saltarte si tu acelerador de bronceado cuenta con un SPF +30 o más. Te recomendamos que no lo hagas. ¡El protector solar es lo más importante!
Al volver, limpia tu piel y aplica aftersun para un resultado hidratado y bonito.
¿Los bronceadores son seguros?
Según la doctora Cristina Eguren Michelena, miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), “en sí mismos, los aceleradores de bronceado (bronceadores) no son malos. El problema es que, para que actúen, es necesario broncearse, es decir, exponerse al sol y ahí está el problema”. ¡Por eso no puedes olvidar tu protector solar!
¿Qué puedo hacer para broncearme antes?
Piel hidratada. Siempre. Toma líquidos antes, durante y después de la exposición solar, y no escatimes en una buena crema humectante, de modo que la piel esté más elástica y luminosa.
Alimentos que estimulan el bronceado. Habrás oído hablar de ellos, pero algunos son la zanahoria, el kiwi o el aguacate, ricos en vitaminas A que favorece la pigmentación de la piel; C, que tiene efecto antioxidante, y E, que ayuda a proteger la piel de los rayos solares.
Exfolia la piel. Al menos una vez por semana antes de exponerte al sol. La exfoliación sirve para eliminar las células muertas de la piel.
El aftersun. Es el secreto mejor guardado. El aftersun además de hidratar la piel y calmarla, prolonga un bronceado mucho más bonito y duradero.