Igual que hacemos limpiezas profundas en la piel o incluso descansos de ciertos alimentos para mejorar nuestra salud, el cabello también necesita una pausa. Un detox capilar no es una moda más, sino una forma eficaz de resetear el cuero cabelludo y la melena cuando están saturados. ¿Te notas el pelo apagado, graso en las raíces y seco en las puntas? Este tratamiento puede ayudarte.
A lo largo de los días, se acumulan en el cuero cabelludo restos de productos, polución, sudor y grasa natural. Aunque lo laves con frecuencia, muchas veces no es suficiente, sobre todo si usas lacas, espumas, champús secos o sueles alisarte el pelo con calor. Todo esto impide que el cuero cabelludo respire y puede derivar en irritación, caída e incluso caspa.
El detox capilar sirve para limpiar a fondo, reequilibrar la piel del cuero cabelludo y dejar el cabello más ligero, suelto y brillante. Y lo mejor es que no necesitas ir a la peluquería, puedes hacerlo tú misma en casa siguiendo unos pasos sencillos.
¿Qué es un detox capilar y para qué sirve?
Un detox capilar es un tratamiento capilar de limpieza profunda que elimina impurezas, exceso de sebo, residuos de productos y células muertas del cuero cabelludo. También sirve para desintoxicar el pelo de químicos acumulados, como los de tintes, alisados o fijadores.
Su objetivo principal es reactivar la microcirculación del cuero cabelludo y equilibrar la producción de grasa. Así, el pelo puede crecer más fuerte y sano desde la raíz. Además, mejora la absorción de los productos que apliques después, como mascarillas o sérums capilares.
No sustituye a tu rutina habitual, pero sí es un paso complementario que conviene hacer una o dos veces al mes, sobre todo si sientes que el pelo no responde igual, se ensucia más rápido o ha perdido volumen.
Cómo hacer un detox capilar en casa paso a paso
No necesitas un tratamiento profesional para conseguir buenos resultados. Solo debes seguir estos pasos con constancia y elegir productos adecuados para tu tipo de cabello.
1/ Empieza por un cepillado en seco
Antes de mojar el cabello, cepíllalo en seco para eliminar residuos superficiales y estimular la circulación del cuero cabelludo. Usa un cepillo de cerdas naturales y hazlo con suavidad.
2/ Aplica un exfoliante capilar
Este paso es clave. Utiliza un exfoliante específico para cuero cabelludo, con gránulos suaves o activos químicos como ácido salicílico. Masajea con las yemas de los dedos durante unos minutos, insistiendo en la raíz, para eliminar células muertas y restos de productos.
- Consejo: No uses exfoliantes corporales ni faciales en el cuero cabelludo. No están formulados para esa zona y pueden irritarla.
3/ Lava con un champú detox o clarificante
Opta por un champú purificante, sin siliconas ni sulfatos, que ayude a limpiar profundamente sin resecar. Este tipo de champús arrastran mejor los residuos acumulados y dejan una sensación de frescor inmediato. Masajea bien el cuero cabelludo durante el lavado y aclara con abundante agua.
4/ Hidrata con una mascarilla ligera
Después de limpiar, es fundamental aportar hidratación. Usa una mascarilla con ingredientes nutritivos como aloe vera, pantenol o aceite de jojoba. Aplícala de medios a puntas y deja actuar al menos 10 minutos. Evita ponerla en la raíz para no engrasar.
5/ Finaliza con agua fría
Enjuaga la mascarilla con agua fría para sellar la cutícula del cabello y potenciar el brillo. Este gesto también ayuda a calmar el cuero cabelludo.
