Durante años, el movimiento body positive nos recordó algo necesario: que todos los cuerpos son válidos, que merecemos amor propio y que la belleza no debería dictar nuestro valor. Fue un soplo de aire fresco en un mundo obsesionado con los estándares imposibles. Pero, como todas las ideas que pasan por el filtro de las redes sociales, terminó convirtiéndose —en parte— en una presión más: “quiérete siempre”, “ámate siempre”, “celebra todos tus defectos”.
Y claro, no siempre podemos. No todos los días nos sentimos radiantes. No todas las partes de nuestro cuerpo nos gustan. Y obligarnos a celebrarlas puede resultar igual de agotador que intentar cambiarlas.
Por eso ha surgido una nueva corriente que está ganando fuerza: el body neutrality, una forma de relacionarnos con nuestro cuerpo más libre, más realista y, sobre todo, más compasiva.
Hoy, en el blog de Primor, te contamos qué significa este movimiento, por qué está conquistando tantas voces y qué tiene de bueno “pasar de tus defectos” sin sentir culpa.
Qué es el body neutrality
El body neutrality propone algo tan simple como revolucionario, tu cuerpo no tiene por qué ser una fuente constante de autoestima ni una batalla diaria. Puede, simplemente, ser.
No tienes que amar cada parte de él, tampoco odiarla. No tienes que celebrarlo constantemente. Solo reconocer que existe, que te permite vivir, que te acompaña. Y que tu valor como persona no depende de cómo se vea. El objetivo no es quererte más, sino dejar de obsesionarte tanto.
Por qué surge este movimiento
Porque estamos cansadas. Literalmente. Cansadas de compararnos, de buscar ángulos favorecedores, de esconder lo que no nos gusta, de obligarnos a una positividad que no siempre sentimos.
- El body positive abrió puertas necesarias, pero en redes acabó transformándose en un ideal estético más: “estar segura”, “verte perfecta sin filtros”, “mostrar la celulitis pero con luz bonita”.
- El body neutrality llega para quitarnos peso de encima. Para decirnos: “No pasa nada si hoy no te gustas demasiado. No pasa nada si hay cosas que preferirías que fueran diferentes. Sigues siendo válida.”
Lo bueno de pasar de tus defectos
Sí, suena fuerte, pero en realidad es liberador. Estas son algunas razones por las que esta filosofía funciona tan bien:
Dejas de pelear contigo misma
Aceptar neutralidad significa dejar de luchar contra tus supuestos defectos. Reducir esa guerra interna libera energía mental que puedes usar en cosas más importantes.
Menos autoexigencia
No tienes que estar siempre empoderada. No tienes que sentirte preciosa cada mañana. La neutralidad da permiso para tener días normales, incluso malos, sin culpa.
Reconectas con lo funcional
El cuerpo pasa de ser un objeto a ser un lugar donde vivir. Empiezas a apreciarlo por lo que hace: caminar, abrazar, digerir, respirar, sostenerte. Y eso sí que es revolucionario.
Menos consumo emocional
Cuando tu valor no depende tanto de tu apariencia, compras con más calma, eliges ropa por comodidad, disfrutas el autocuidado sin la presión de “mejorar”.
Reduce la comparación
La neutralidad amortigua el ruido de las redes. Te hace menos vulnerable a estándares imposibles y más consciente de tu propio ritmo.
Ad Category: Primor Fit
