Que tu mascota tenga calor es lo más normal del mundo en verano. Otra cosa es cuando este calor puede ser demasiado para ella e, incluso, hacerle daño. Hay maneras de saber cuándo tu mascota tiene demasiado calor, para tener en cuenta que quizás en estos momentos necesite cuidados extra. Vamos a ver cuáles son las cinco señales de que esto está pasando y cómo puedes solventarlo.
5 señales de que tu mascota tiene demasiado calor
Como hemos dicho, lo primero es saber cuándo tu mascota está teniendo más calor de la cuenta, para que podamos actuar en consecuencia y proporcionarle ayuda o apoyo para que no se deshidrate o tenga síntomas y efectos secundarios por ello. Estas son las cinco señales de que tu mascota tiene demasiado calor:
- Apatía o letargo: es decir, que tu mascota se mueve menos de lo que suele hacerlo o se muestra más apática y cansada. Esto puede ser una señal de que el calor está siendo demasiado para ella, por lo que en este caso deberías actuar en consecuencia y hacer cosas para aplacarlo.
- Está perdida: cuando ves que tu mascota está desorientada, es probable que se deba también al calor. Como nos pasa a las personas, si este es excesivo, puede ralentizarnos y confundirnos. De hecho, en estos casos es urgente actuar cuanto antes, ya que puede llegar a tambalearse o desmayarse.
- Jadea de más: aunque las mascotas suelen jadear cuando hace calor y eso es normal, cuando hace demasiado, quizás sientas que este gesto se enfatiza. Es señal de que debes hacer algo por ella.
- Vómitos: si tiene vómitos esto puede ser señal de un golpe de calor grave.
- Salivación: en el caso de que salive más de la cuenta, también es conveniente que estés vigilante y tengas a mano más cuidados de la cuenta. A continuación veremos cuáles son.
- Encías rojas: si ves que tiene las encías rojas o que se están enrojeciendo, esto es señal también de que necesitas prestarle más atención.
Cómo ayudar a tu mascota en un golpe de calor
Como hemos comentado, es importante que ayudes a tu mascota y la cuides de forma más atenta si estamos ante una ola de calor o si le da un golpe de calor repentino y algunos de los síntomas que acabamos de ver, incluso se agravan:
- Dale agua: que esté fresca y a poder ser que no lleve hielo, ya que si hace demasiado calor esto podría provocar un choque térmico. Tampoco es bueno que la obligues a que beba muy deprisa, ya que en algunos casos esto no es positivo. Puede que estés asustado/a, pero ten en cuenta que ella se autorregula y bebe lo que necesita.
- Ponle algo mojado: ponerle algo mojado encima, como una pequeña toalla o una prenda de ropa hará que su cuerpo comience a enfriarse y pueda reponerse del golpe de calor. Si no lo aguanta o se zafa, puedes mojarte las manos de vez en cuando y tocar su pelaje para humedecerlo.
- Lugar con sombra: lo mejor es que aunque tenga el impulso de buscar siempre la luz del sol, puedas ponerle su camita en un sitio con sombra o redirigirla a un lugar fresco de la casa.
- Climatización: en el caso de que el calor sea exagerado y temas que pueda pasarle algo, lo mejor es que cuentes con sistemas de climatización como un ventilador o un enfriador de aire a base de agua fresca, si no tienes aire acondicionado. Sobre todo la segunda opción puede hacerle mucho bien.
- Atención veterinaria: en el caso de que sospeches que tu mascota tiene un golpe de calor, porque sufre uno o varios de los síntomas que hemos visto antes, no dudes en buscar ayuda veterinaria.
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