Hay ingredientes que no solo perfuman, sino que cambian por completo la energía de una fragancia. Uno de los más magnéticos, vibrantes y reconocibles es la grosella negra —también conocida como blackcurrant o cassis—. Una nota jugosa, chispeante y ligeramente ácida que aporta modernidad, carácter y frescura a cualquier composición perfumista.
La grosella negra se ha convertido en un imprescindible de la perfumería contemporánea por su forma de abrir una fragancia con personalidad, de aportar brillo sin perder elegancia y de añadir ese toque afrutado sofisticado que no cae en lo dulce.
Hoy, en el blog de Primor, te contamos qué es exactamente la grosella negra en perfumería, cómo huele y por qué la vas a empezar a identificar en tus perfumes favoritos.
Qué es la grosella negra en perfumería
La grosella negra (Ribes nigrum) es un pequeño fruto oscuro y brillante originario de Europa y Asia. Aunque en gastronomía la conocemos por su sabor ácido y profundo, en perfumería no se utiliza el zumo del fruto, sino su absoluto, extraído principalmente de los brotes y hojas del arbusto.
Este absoluto de grosella negra es uno de los ingredientes más complejos y sorprendentes del universo olfativo: no solo es afrutado, también es ligeramente verde, amaderado y hasta un poco animalic. Esa dualidad hace que sea una nota tremendamente rica y versátil.
Cómo huele realmente la grosella negra
Describir el olor de la grosella negra es un ejercicio sensorial en sí mismo. No es un simple aroma a fruta; es mucho más.
Afrutado, sí… pero sofisticado
La grosella negra aporta una salida jugosa, brillante, fresca y ligeramente ácida. No huele a fruta madura ni empalagosa, sino a fruta crujiente, intensa y moderna. Ese punto ácido le da un carácter energizante que atrapa desde el primer spray.
Verde y herbáceo
Junto a la faceta afrutada aparece un matiz verde, casi crujiente, like si estrujaras una hoja entre los dedos. Ese aspecto vegetal le da naturalidad y equilibrio, evitando que la fragancia se vuelva demasiado dulce.
Ligeramente animalic
Una de las características más curiosas del absoluto de brote de grosella negra es su pequeño toque animalic, que aporta profundidad y sensualidad. No es evidente, pero está ahí, sosteniendo el aroma y dándole cuerpo.
Luminoso y elegante
La grosella negra aporta luz. Aporta frescura. Y, al mismo tiempo, aporta una sensación envolvente que la hace ideal tanto para perfumes femeninos como unisex.
Por qué es un ingrediente tan amado por los perfumistas
La grosella negra aparece sobre todo en las notas de salida de un perfume, pero su presencia es tan potente que puede influir en toda la composición.
Es amada por los perfumistas porque:
1. Aporta personalidad al instante. Un perfume con grosella negra rara vez pasa desapercibido: es reconocible, moderno y vibrante.
2. Se mezcla bien con casi todo. Va de maravilla con flores (rosa, jazmín, peonía), con cítricos (bergamota, limón), con almizcles suaves y con vainillas ligeras.
3. Es fresca sin ser infantil. A diferencia de otros frutos rojos, la grosella negra tiene ese toque verde-amaderado que la hace adulta y elegante.
4. Equilibra composiciones dulces. En perfumes gourmand o cálidos, aporta brillo y acidez, impidiendo que el conjunto sea empalagoso.
5. Es versátil. Funciona igual de bien en fragancias diurnas, nocturnas, veraniegas o invernales.
Ad Category: Perfumes
